Era de noche, y llovía… bastante fuerte a decir verdad. Llegamos al departamento de mi novio totalmente empapados, yo llevaba puesto un top blanco ajustado sin brassiere, un pantalón negro de vestir apretado y unos tacones negros y un saco negro también. Creo que esa noche fue una mala idea no llevar brassiere a la fiesta…. Nada mas del trayecto de la camioneta al departamento termine empapada y mis pezones se dejaron ver, mi novio aun no se daba cuenta.
Me quité el saco, lo puse en una silla y puse un CD mientras mi novio salía del baño, música electrónica (que me gusta mucho para el momento de coger), saqué unas cervezas del refrigerador, se que mi novio no le puede decir que no a una cerveza… ni a mi. Él salió del baño, yo estaba de espaldas a él, eché mi cabello para atrás antes de voltearme a verlo, mi cabello llega un poco mas debajo de mis pechos, y a mi novio siempre le ha gustado su color dorado por eso es que nunca me lo he pintado. Volteé a verlo, al principio por la luz no alcanzó a ver mis pechos que se dejaban ver a través de la blusa mojada, tomé la cerveza y de manera deliberada las puse a la altura de mis senos, le sonreí, me acerque, me di la cerveza asegurándome de que viera mis pechos.
Noté en su mirada que le había gustado como se veían mis pezones paraditos por el frio y mostrándose a él.
Tomamos 2 o 3 cervezas mas y mientras platicábamos de cómo estuvo la fiesta de su mamá yo juntaba mis brazos con el fin de juntar mis senos, o estiraba mis brazos para que los viera bien, eso me empezó a excitar y mis pezones ya no estaban duros y parados por el frio si no porque ya me había imaginado todo lo que pasaría esa noche.
Me tomé las cervezas rápido a propósito para que me pegaran un poco más, ya que así soy un poco más atrevida con mi novio en la cama, ya me comenzaban a hacer efecto entonces me paré de mi silla y me le senté a mi novio en las piernas quedando frente a el.
No tienes nada que decirme amor?- le pregunté.
No, para nada- me contestó
No me digas que no has notado que mis pechos están mojaditos, que mi pezón se marcaba por encima de mi blusa… no me digas que no te gusta verlos.
Acto seguido lo comencé a besar, y en seguida lleve sus manos a mis senos, hice que los apretara y después el comenzó a hacerlo solo, empecé a moverme de adelante hacia atrás y lentamente sentí como esa verga gruesa se erectaba. Él agarro mi culo y lo empezó a mover más duro.
Hoy haz lo que quieras conmigo…. Lo que quieras- le susurré al oído-
Me cargó y yo lo abracé con mis piernas mientras le besaba el cuello y los lóbulos de las orejas, me llevó al baño, abrió la llave de la regadera y nos metimos con todo y ropa. Apenas adentro, me puse de rodillas le quite los pantalones y los bóxers y le vi la pija enorme, dura, primero pasé mi lengua por la cabeza del pene, luego de arriba a abajo asegurándome de que sintiera bien el arete que tengo en la lengua, después me la llevé a la boca y se la empecé a mamar despacito y conforme aumentaba el ritmo de la música (que aun se escuchaba desde la sala)fui subiendo la velocidad, le chupaba los huevos de haciendo círculos, de arriba a abajo hasta que mi novio me quito de su pene, puse un poco de resistencia porque quería seguir chupándosela, como puse resistencia el aprovechó y jalo del cabello, sabe que eso me excita mucho, me levanto, nos miramos y entonces me soltó una cachetada, que fuera de enojarme me prendió mas.
Vas a hacer lo k yo te diga, entiendes?- me dijo agarrándome con fuerza el cabello. Voltéate-
M e di vuelta quedando de espaldas a el, sintiendo el agua en mis pechos, mi cara, mi abdomen. El me quito el pantalón, se puso de rodillas y me inclino hacia adelante dejando mi panocha a su merced. Comenzó a tocarme el clítoris, de arriba a abajo, en círculos, mientras con su lengua me daba placer en mi concha, metía su lengua hasta donde podía, me lamía los labios de mi vagina ya toda húmeda de lo excitada que me tenía, cada vez lo hacía de manera mas salvaje, me metió dos dedos de golpe en la vagina y comenzó a moverlos dentro de ella, yo me retorcía de placer y comencé a gemir. Así duró unos 3 o 4 minutos.
Se paró, me dio la vuelta y me dijo que le quitara la playera, lo hice rápido, después me dijo que me quitara la mía, eso lo hice mas lentamente. Se abalanzó sobre mis tetas y las empezó a lamer, a besar, chupaba mis pezones y de vez en cuando me mordía, al mismo tiempo pasaba su verga hinchada por fuera de mi vagina, yo sentía que no podía mas, me quería comer ese pene tan delicioso.
Cógeme papi, cógeme ya. – le pedí. A lo que el me contestó con otra cachetada
Te dije que hablaras? Te voy a coger cuando quiera- me respondió
Cabe mencionar que mi novio nunca me ha pegado a menos que no sea teniendo sexo y que no es el típico macho que exige que se haga lo que él diga, pero a la hora de coger sabe que me encanta que me trate así.
Me tomó con fuerza del cabello y me hizo hincar.
Mételo entre tus tetas- me ordenó y yo rápidamente puse su verga entre mis dos grandes senos, blancos con pezones medianitos y rosas, comencé a mover mis tetas en círculos y cada vez que podía le lamía el pene o jugaba con mi arete en él, mi novio gemía y me excitaba aun más de lo que ya estaba.
Duramos así unos 5 minutos y después se quitó se sentó en una “banquita” que tiene dentro la regadera, me miró fijamente y después miró su verga parada
La quieres verdad putita?- Yo solo moví la cabeza diciendo que si. Móntate en ella- me dijo
No espere más tiempo, me subí a la baquita, sentándome en mi novio como al principio… que dando frente a él y de un solo sentón metí su pene el mi vagina ya escurrida de todos lo líquidos que me salín por la excitación.
Mi novio apretó mi culo con sus manos, me daba varias nalgadas, yo me movía duro, de adelante a atrás y por como estábamos acomodados una parte de su abdomen estimulaba mi clítoris con el roce, mi novio me ordenaba ir más rápido, yo estaba a punto de correrme, con semejante vega partiéndome en dos, la sentía en mis paredes vaginales perfectamente, y el roce de mi clítoris me estaba haciendo llegar a un orgasmo delicioso.
Yo: Papi, ya me voy a correr-
Él: vente puta, vente.
Yo: No! Quiero venirme contigo.
Mi novio me dio una cachetada y me dijo:
Que te vengas puta, vente en mi, empápame- no tuvo que decir mas, cuando me corrí a pesar de que estábamos en la regadera sentí los fluidos calientes que salían de mi concha y caían hasta sus huevos.
De todos modos seguí moviéndome…. No pasó mucho tiempo cuando mi novio, se vino en mi y a pesar de que ya había tenido mi orgasmo me prendió mucho sentir su lechita caliente dentro de mi.
Por favor chicos y chicas dejen sus comentarios, son muy importantes para mi. Gracias y ojalá les haya gustado