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Más barato que el psicoanalista es poner en palabras las cosas que nos vienen molestando desde hace años. La escritura materializa la rabia y, así, permite el exorcismo. Así que ahí va:
Mi concuña es una puta zángana a la que no le digo mantenida nada más porque ese término parece ser monopolio absoluto de mi cuñado: un pendejo mequetrefe de 30 años cuyo mayor logor es haber estado en el reclusorio por desfalcar a Banco Azteca y nunca haber terminado la prepa. Maldito imbécil, cree que ser un gran padre es ponerle putizas salvajes a sus hijos por asomarse a la calle mientras no tiene empacho alguno en dejarlos "al cuidado" de su cuñada en una vecindad conocida por su historial de abusos sexuales a menores.
Y ahí lo tienen: tragando como un vil cerdo del negocio de comida corrida de mi suegra, permitiendo que su pinche vieja le haga jetas y groserías a todos los demás (porque vive en un cuartucho en la planta superior de la casa materna —¿dónde más?— que le construyó su madre).
Ya estoy hasta la madre de que todos los días nos tengamos que enterar de sus patanerías. Y me encabrona pensar que gente valiosa, profesionistas que se parten la madre por su familia, se mueran de cualquier pinche infección pendeja mientras parece que todo el puto colesterol del mundo no puede matar a ese pinche cerdo traga-carnitas.
El desahogo alivia…:metal::metal::metal:
Mi concuña es una puta zángana a la que no le digo mantenida nada más porque ese término parece ser monopolio absoluto de mi cuñado: un pendejo mequetrefe de 30 años cuyo mayor logor es haber estado en el reclusorio por desfalcar a Banco Azteca y nunca haber terminado la prepa. Maldito imbécil, cree que ser un gran padre es ponerle putizas salvajes a sus hijos por asomarse a la calle mientras no tiene empacho alguno en dejarlos "al cuidado" de su cuñada en una vecindad conocida por su historial de abusos sexuales a menores.
Y ahí lo tienen: tragando como un vil cerdo del negocio de comida corrida de mi suegra, permitiendo que su pinche vieja le haga jetas y groserías a todos los demás (porque vive en un cuartucho en la planta superior de la casa materna —¿dónde más?— que le construyó su madre).
Ya estoy hasta la madre de que todos los días nos tengamos que enterar de sus patanerías. Y me encabrona pensar que gente valiosa, profesionistas que se parten la madre por su familia, se mueran de cualquier pinche infección pendeja mientras parece que todo el puto colesterol del mundo no puede matar a ese pinche cerdo traga-carnitas.
El desahogo alivia…:metal::metal::metal: