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- #1
Llegué antes de las siete al lugar y cuando entre todo estaba un poco oscuro y no se distinguía casi nada, pero ya había seis chicos ahí esperándome. No hacía falta adivinar que estaban haciendo ahí, lo supe desde que leí el mensaje: me querían coger otra vez.
No dije nada y en silencio subí mi falda y mostré mi coño a esos chicos, sin ropa interior y no hubo necesidad de hablar, simplemente me puse en cuatro y espere al primero. Sus manos me tomaron por las nalgas y con mis piernas un poco separadas simplemente escupió en su mano para lubricar su falo. Recargue mi cabeza en el frío piso y paré lo más que pude el trasero para facilitar la penetración.
Me folló durante unos minutos mientras de mi boca salían gemidos entrecortados, y tal vez sientas lástima por mí, pero deseaba que me follaran siempre como una perra en celo. Deje que me llenaran la boca con sus penes, los masturbe, les mamé, les permití que se corrieran en mi cara y en mi boca, dejé que me usaran a su antojo y yo coopere con ellos en todo momento.
Sentirme sucia y puta me llenaba de excitación, y yo misma me separé las nalgas para pedir que me dieran por el culo, porque a las perras se las follan por el culo. Aunque dolió no grite, solo pujidos salía de mi boca mientras me enculaban analmente y varios de ellos me terminaron adentro.
Les permití chuparme los senos, que mordieran mis pezones, que me los llenaran de su leche. Supliqué por su semen en mi boca y en mi cara, y no me queje cuando me tomaban videos con sus móviles algunos de ellos.
Quedé sola en ese lugar, sudorosa, embarrada de leche por todos lados, con el culo adolorido y la concha irritada, los senos con chupetones, las nalgas maltratadas y con tierra en mis rodillas y cara.
Una semana después otro mensaje me llegó al móvil por la noche, traía anexo un link de una página web y una contraseña para ingresar, y no pude resistir la curiosidad de ver de que se trataba. Ahí en esa página, un blog, estaba yo, y los videos que me habían tomado en la fiesta y en la casa abandonada; sin ningún pudor mire una y otra vez cada imagen en donde era sometida y tratada pero que una puta, como mi cuerpo había sido mancillado a más no poder, como mi dignidad como mujer había caído más allá del suelo, directo al infierno. Pero lo disfruté.
Aquí dejo esta parte de mi vida, pero te sorprenderás cuando te cuente algo más. Cuídate y no me juzgues, porque aún falta lo demás y al final, tendrás tu opinión y luego me dirás.
Siempre tuya Marigel.
fin PARTE 2
No dije nada y en silencio subí mi falda y mostré mi coño a esos chicos, sin ropa interior y no hubo necesidad de hablar, simplemente me puse en cuatro y espere al primero. Sus manos me tomaron por las nalgas y con mis piernas un poco separadas simplemente escupió en su mano para lubricar su falo. Recargue mi cabeza en el frío piso y paré lo más que pude el trasero para facilitar la penetración.
Me folló durante unos minutos mientras de mi boca salían gemidos entrecortados, y tal vez sientas lástima por mí, pero deseaba que me follaran siempre como una perra en celo. Deje que me llenaran la boca con sus penes, los masturbe, les mamé, les permití que se corrieran en mi cara y en mi boca, dejé que me usaran a su antojo y yo coopere con ellos en todo momento.
Sentirme sucia y puta me llenaba de excitación, y yo misma me separé las nalgas para pedir que me dieran por el culo, porque a las perras se las follan por el culo. Aunque dolió no grite, solo pujidos salía de mi boca mientras me enculaban analmente y varios de ellos me terminaron adentro.
Les permití chuparme los senos, que mordieran mis pezones, que me los llenaran de su leche. Supliqué por su semen en mi boca y en mi cara, y no me queje cuando me tomaban videos con sus móviles algunos de ellos.
Quedé sola en ese lugar, sudorosa, embarrada de leche por todos lados, con el culo adolorido y la concha irritada, los senos con chupetones, las nalgas maltratadas y con tierra en mis rodillas y cara.
Una semana después otro mensaje me llegó al móvil por la noche, traía anexo un link de una página web y una contraseña para ingresar, y no pude resistir la curiosidad de ver de que se trataba. Ahí en esa página, un blog, estaba yo, y los videos que me habían tomado en la fiesta y en la casa abandonada; sin ningún pudor mire una y otra vez cada imagen en donde era sometida y tratada pero que una puta, como mi cuerpo había sido mancillado a más no poder, como mi dignidad como mujer había caído más allá del suelo, directo al infierno. Pero lo disfruté.
Aquí dejo esta parte de mi vida, pero te sorprenderás cuando te cuente algo más. Cuídate y no me juzgues, porque aún falta lo demás y al final, tendrás tu opinión y luego me dirás.
Siempre tuya Marigel.
fin PARTE 2
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