Travieso87
Becerro
- Desde
- 15 Dic 2008
- Mensajes
- 24
- Tema Autor
- #1
Relato: mi suegra y sus vicios ocultos 1
Hola Bakunos! La siguiente historia es totalmente verídica, misma que aconteció hace solo unos meses en el municipio de Comalcalco, Tabasco lugar de donde resido desde hace algunos años. Bueno primero les diré que soy un hombre normal, de 1.78 de estatura, moreno claro, de 37 años de edad , felizmente casado desde hace nueve años con mi esposa a quien llamaremos Alondra (ella tiene 34 años) y con dos preciosos hijas.
Mi suegra (mamá de mi esposa), a quien llamaremos Guadalupe, de 51 años de edad, es una mujer sumamente atractiva de 1.67 de estatura, separada desde hace 12 años de mi suegro, como toda tabasqueña morena, con unas tetas y culo dignos de comerlos diario, piernas bien torneadas y con una jugosa pucha (la cual ya he comido en algunas ocasiones), un vientre hermoso pese a los tres embarazos (2 divinas mujeres y 1 hombre).
Cabe señalar que aunque desde hace muchos años conozco a doña Lupita, como cariñosamente la llamamos, nunca me había fijado en ella como una mujer candente, toda una puta experta en la cama que necesitaba y buscaba con ansiedad de unas buenas dosis de verga, pensamiento que cambio apenas en enero de este año.
Empieza lo bueno: Fue el 19 de enero, fecha que recordaré por siempre, como todos los días me encontraba en la oficina de gobierno donde laboro, cuando cerca de las 10 de la mañana llamó Alondra para pedirme de favor que fuera por unas cosas que doña Lupita tenia para las niñas, así que como no había mucho trabajo, accedí a ir a visitar a mi suegra.
Sin mayor maldad hasta este momento, arribé a su hogar, y dado que tenemos llaves del zaguán y de la casa (por aquello de “lo que se ofrezca”) entre, notando que aparentemente mi suegra no se encontraba en casa, por lo que decidí esperarla unos minutos, pero al paso de los minutos escuche algunos ruidos provenientes de su habitación por lo que acudí para verificar que todo estuviera en orden.
Al acercarme note ya con mayor claridad que aquellos “ruidos” erán más bien gemidos de placer, por lo que pensé que tal vez y ante mi inesperada y tempranera visita, ella se encontraba cogiendo de lo lindo con algún novio oculto que tuviese, y es que los ahhhhhhhh, soy una putaaaaa, dame más, dame fuerteee, retumbaban, por lo que ante lo caliente de sus gemidos, buscaba aprovechar la oportunidad para espiarla y masturbarme con lo que viese.
Pero mayor fue mi sorpresa al observar lo que sucedía dentro de su habitación, pues la puerta estaba abierta (fue obvio que no esperaba mi visita tan temprano), era algo prohibido para mi, pero a la vez una exquisita escena sexual, algo que después se convirtió en un sueño y hoy en día una realidad.
Doña Lupita estaba sobre la cama, con los ojos cerrados, con las piernas totalmente abiertas jugando con un tremendo consolador (dildo) metiendo y sacándoselo de su hermosa pucha y diciéndose a sí misma que era una gran putaaaa, que necesitaba de una verga, escena que me calentó de inmediato por lo que saque mi palo y sin dejar de ver tal escena me hice una de las mejores chaquetas observando que mi suegra, (a quién siempre había pensado como una mujer hasta cierto punto recatada en temas de sexualidad).
Tratando de no ser visto por mi suegra (estaba tan concentrado en lo mío y en el espectáculo, que nunca vi que mi querida suegra me observaba, así me lo dijo días después) noté que mi querida suegra tomaba su enorme consolador (de 25 centímetros) y aún inundado con jugos se lo llevo a la boca y simulando tener una verga real succionaba el dildo de una manera que pocas veces había visto querer un palo de hombre dentro de una boca de mujer (solo mi esposa lo hacía de la misma manera de que madre, ahí vio de donde lo aprendió)
Sin dejar de hacer esto, quién ahora es mi lupita (o como ella dice mi mejor perra y puta) metía dentro de su hermosa vagina dos de sus dedos y al ritmo de frenéticos movimientos circulares buscaba darse placer, y al mismo tiempo me daba un show que nunca había imaginado, verla así totalmente desnuda, abierta de piernas, disfrutando de su sexo y de un consolador metido en su boca pfff, me hizo llegar al orgasmo al mismo tiempo que ella gritaba asiiiiiiiiiiiiiii, sigueeeeeeeee, dameeeee todoooo, ayyyyyyyy, si papiiiiiii, dameeeee vergaaa.
Sin hacer ruido me subí el pantalón y el bóxer guardando mi herramienta, tratando de que mi suegra no notará mi presencia, (aunque mis mecos que había aventado en la puerta de su habitación me delatarían), baje las escaleras y salí de la casa, tratando de calmar mis ansias y mi erección que seguía a todo lo que daba, al tiempo que buscaba darle tiempo a mi preciosa y ahora caliente suegra a que se vistiera, simulando apenas llegar por el encargo que mi Alondra (su hija y mi esposa) me había encargado recoger en su casa vía celular.
Luego de 15 minutos simulé tocar el timbre de la casa, saliendo a abrirme doña Lupita, quién ya vestía un camisón hasta cierto punto transparente color azul y un short de licra del mismo color aunque no traía brassier lo que hacía lucir sus tetas que apenas minutos antes había visto totalmente desnudas.
Yo-Hola suegra, disculpe la molestia, venía por unas cosas para las niñas, alondra me llamó a la oficina y me pidió de favor que viniera por ellas
Doña Lupita- Hola hijo, como estás pásale, pásale no te quedes ahí, mírate nomás parece que vinieras caminado desde el centro y con este calor ya estas sudando, pásale.
Yo-No, no, gracias veo que anda haciendo el quehacer (actividades domésticas de la casa) mejor me quedo acá afuera para no ensuciar (según y yo un buen pretexto para evitar que viera mi erección).
Doña Lupita-Púes si y no, pero mejor pásale en lo que busco lo que tengo para mis nietas.
Yo- Bueno pero solo un ratoo porque tengo que regresar a la oficina…
SI QUIEREN SABER COMO LOGRÉ COGERME A MI SUEGRA NO SE PIERDAN EL PRÓXIMO RELATO EN ESTOS DÍAS.
SALUDOS A TODOS!!
Hola Bakunos! La siguiente historia es totalmente verídica, misma que aconteció hace solo unos meses en el municipio de Comalcalco, Tabasco lugar de donde resido desde hace algunos años. Bueno primero les diré que soy un hombre normal, de 1.78 de estatura, moreno claro, de 37 años de edad , felizmente casado desde hace nueve años con mi esposa a quien llamaremos Alondra (ella tiene 34 años) y con dos preciosos hijas.
Mi suegra (mamá de mi esposa), a quien llamaremos Guadalupe, de 51 años de edad, es una mujer sumamente atractiva de 1.67 de estatura, separada desde hace 12 años de mi suegro, como toda tabasqueña morena, con unas tetas y culo dignos de comerlos diario, piernas bien torneadas y con una jugosa pucha (la cual ya he comido en algunas ocasiones), un vientre hermoso pese a los tres embarazos (2 divinas mujeres y 1 hombre).
Cabe señalar que aunque desde hace muchos años conozco a doña Lupita, como cariñosamente la llamamos, nunca me había fijado en ella como una mujer candente, toda una puta experta en la cama que necesitaba y buscaba con ansiedad de unas buenas dosis de verga, pensamiento que cambio apenas en enero de este año.
Empieza lo bueno: Fue el 19 de enero, fecha que recordaré por siempre, como todos los días me encontraba en la oficina de gobierno donde laboro, cuando cerca de las 10 de la mañana llamó Alondra para pedirme de favor que fuera por unas cosas que doña Lupita tenia para las niñas, así que como no había mucho trabajo, accedí a ir a visitar a mi suegra.
Sin mayor maldad hasta este momento, arribé a su hogar, y dado que tenemos llaves del zaguán y de la casa (por aquello de “lo que se ofrezca”) entre, notando que aparentemente mi suegra no se encontraba en casa, por lo que decidí esperarla unos minutos, pero al paso de los minutos escuche algunos ruidos provenientes de su habitación por lo que acudí para verificar que todo estuviera en orden.
Al acercarme note ya con mayor claridad que aquellos “ruidos” erán más bien gemidos de placer, por lo que pensé que tal vez y ante mi inesperada y tempranera visita, ella se encontraba cogiendo de lo lindo con algún novio oculto que tuviese, y es que los ahhhhhhhh, soy una putaaaaa, dame más, dame fuerteee, retumbaban, por lo que ante lo caliente de sus gemidos, buscaba aprovechar la oportunidad para espiarla y masturbarme con lo que viese.
Pero mayor fue mi sorpresa al observar lo que sucedía dentro de su habitación, pues la puerta estaba abierta (fue obvio que no esperaba mi visita tan temprano), era algo prohibido para mi, pero a la vez una exquisita escena sexual, algo que después se convirtió en un sueño y hoy en día una realidad.
Doña Lupita estaba sobre la cama, con los ojos cerrados, con las piernas totalmente abiertas jugando con un tremendo consolador (dildo) metiendo y sacándoselo de su hermosa pucha y diciéndose a sí misma que era una gran putaaaa, que necesitaba de una verga, escena que me calentó de inmediato por lo que saque mi palo y sin dejar de ver tal escena me hice una de las mejores chaquetas observando que mi suegra, (a quién siempre había pensado como una mujer hasta cierto punto recatada en temas de sexualidad).
Tratando de no ser visto por mi suegra (estaba tan concentrado en lo mío y en el espectáculo, que nunca vi que mi querida suegra me observaba, así me lo dijo días después) noté que mi querida suegra tomaba su enorme consolador (de 25 centímetros) y aún inundado con jugos se lo llevo a la boca y simulando tener una verga real succionaba el dildo de una manera que pocas veces había visto querer un palo de hombre dentro de una boca de mujer (solo mi esposa lo hacía de la misma manera de que madre, ahí vio de donde lo aprendió)
Sin dejar de hacer esto, quién ahora es mi lupita (o como ella dice mi mejor perra y puta) metía dentro de su hermosa vagina dos de sus dedos y al ritmo de frenéticos movimientos circulares buscaba darse placer, y al mismo tiempo me daba un show que nunca había imaginado, verla así totalmente desnuda, abierta de piernas, disfrutando de su sexo y de un consolador metido en su boca pfff, me hizo llegar al orgasmo al mismo tiempo que ella gritaba asiiiiiiiiiiiiiii, sigueeeeeeeee, dameeeee todoooo, ayyyyyyyy, si papiiiiiii, dameeeee vergaaa.
Sin hacer ruido me subí el pantalón y el bóxer guardando mi herramienta, tratando de que mi suegra no notará mi presencia, (aunque mis mecos que había aventado en la puerta de su habitación me delatarían), baje las escaleras y salí de la casa, tratando de calmar mis ansias y mi erección que seguía a todo lo que daba, al tiempo que buscaba darle tiempo a mi preciosa y ahora caliente suegra a que se vistiera, simulando apenas llegar por el encargo que mi Alondra (su hija y mi esposa) me había encargado recoger en su casa vía celular.
Luego de 15 minutos simulé tocar el timbre de la casa, saliendo a abrirme doña Lupita, quién ya vestía un camisón hasta cierto punto transparente color azul y un short de licra del mismo color aunque no traía brassier lo que hacía lucir sus tetas que apenas minutos antes había visto totalmente desnudas.
Yo-Hola suegra, disculpe la molestia, venía por unas cosas para las niñas, alondra me llamó a la oficina y me pidió de favor que viniera por ellas
Doña Lupita- Hola hijo, como estás pásale, pásale no te quedes ahí, mírate nomás parece que vinieras caminado desde el centro y con este calor ya estas sudando, pásale.
Yo-No, no, gracias veo que anda haciendo el quehacer (actividades domésticas de la casa) mejor me quedo acá afuera para no ensuciar (según y yo un buen pretexto para evitar que viera mi erección).
Doña Lupita-Púes si y no, pero mejor pásale en lo que busco lo que tengo para mis nietas.
Yo- Bueno pero solo un ratoo porque tengo que regresar a la oficina…
SI QUIEREN SABER COMO LOGRÉ COGERME A MI SUEGRA NO SE PIERDAN EL PRÓXIMO RELATO EN ESTOS DÍAS.
SALUDOS A TODOS!!