lotoxs
Bovino maduro
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Una investigación encontró que quienes están más conectados con la universalidad tienen encuentros eróticos positivos
¿Es sexy ser espiritual? De acuerdo con la revista Livescience sí, pero depende del género. Una nueva investigación señala que la espiritualidad tiene un efecto mayor en la vida sexual de los adultos jóvenes que la religión, la impulsividad o el alcohol. Y que además esto puede ser un factor de riesgo para las mujeres.
Jessica Burris, científica de la Universidad de Kentucky y encargada del estudio señala: "Creo que la gente que tiene creencias más espirituales lleva este hecho a todos los planos de su vida. Por ello decidimos iniciar esta investigación". A lo que agrega, "este hallazgo, más que religioso es espiritual".
Los resultados de la investigación arrojaron que quienes se sienten espirituales o se sienten más conectados con la universalidad, tienen sexo positivo.
La autora señala que quienes se sienten más interconectados espiritualmente con el otro, buscan obtener una armonía indispensable en el sexo, pero depende del género. Hombres y mujeres espirituales reaccionan de distinta manera: "De hecho darle cualidades sacras al sexo está positivamente asociado con las reacciones que se tienen del sexo mismo, la frecuencia, el número de parejas y hasta la forma de cuidarse: ellos usan más condones y tienen menos sexo, mientras que ellas dejan de usarlos y tienen más parejas sexuales".
Por ejemplo, en los varones que se dicen más espirituales la frecuencia del sexo decrece, pues ellos no consideran indispensable la intimidad para realmente conocer o amar a alguien; mientras que para las mujeres es al revés: ellas aumentan el número de sus parejas sexuales, la frecuencia y tienen la tendencia a usar sexo sin condón. Por tanto, señala la investigación, "al menos en las mujeres la espiritualidad puede ser considerada un factor de riesgo".
¿Es sexy ser espiritual? De acuerdo con la revista Livescience sí, pero depende del género. Una nueva investigación señala que la espiritualidad tiene un efecto mayor en la vida sexual de los adultos jóvenes que la religión, la impulsividad o el alcohol. Y que además esto puede ser un factor de riesgo para las mujeres.
Jessica Burris, científica de la Universidad de Kentucky y encargada del estudio señala: "Creo que la gente que tiene creencias más espirituales lleva este hecho a todos los planos de su vida. Por ello decidimos iniciar esta investigación". A lo que agrega, "este hallazgo, más que religioso es espiritual".
Los resultados de la investigación arrojaron que quienes se sienten espirituales o se sienten más conectados con la universalidad, tienen sexo positivo.
La autora señala que quienes se sienten más interconectados espiritualmente con el otro, buscan obtener una armonía indispensable en el sexo, pero depende del género. Hombres y mujeres espirituales reaccionan de distinta manera: "De hecho darle cualidades sacras al sexo está positivamente asociado con las reacciones que se tienen del sexo mismo, la frecuencia, el número de parejas y hasta la forma de cuidarse: ellos usan más condones y tienen menos sexo, mientras que ellas dejan de usarlos y tienen más parejas sexuales".
Por ejemplo, en los varones que se dicen más espirituales la frecuencia del sexo decrece, pues ellos no consideran indispensable la intimidad para realmente conocer o amar a alguien; mientras que para las mujeres es al revés: ellas aumentan el número de sus parejas sexuales, la frecuencia y tienen la tendencia a usar sexo sin condón. Por tanto, señala la investigación, "al menos en las mujeres la espiritualidad puede ser considerada un factor de riesgo".
¿Pero, realmente es la espiritualidad lo que hace ser a una mujer más sexual o es la espiritualidad una manera de abrirse y manifestarse a través del sexo?