Hoy mas o menos me acordé de este chiste, no es exactamente así pero lo basico está intacto.
En cierto país donde todavia hay monarquía, la princesa era muy moderna y relajada, gustaba de alternar con toda clase de gente y se portaba como si del pueblo fuera, sucede que en esos dias llegaba de visita un mexicano y había que ir a recogerlo, la princesa se apunta a ir ella en la carreta con un caballo, se lo permiten y allá va a toda velocidad y muy divertida, llega a buscar al mexicano, le dice que suba a la carreta y allí vienen platicando de esto y lo otro, de pronto, la princesa ve con horror que el caballo empieza a levantar la cola!...y que suena tremendo pedote apestoso, la pobre, toda avergonzada se quería morir, "que pena con usted, que verguenza! oh Dios mio, perdone usted señor"...y el peladote mexicano que además era norteño le dice sorprendido...-Oiga.. y yo pense que el del pedo había sido el caballo!-