Yo tenia 19 años y no habia tenido novia, pese a que me encantaban las chicas, en especial una. Nisiquiera habia hablado con ella, solo la veia cuando salia de la escuela puntualmente a las 2, justo cuando ella entraba, de este modo solo la podia ver por unos segundos y tres dias a la semana. DEMASIADO POCO, pero un bue dia mi amigo me alegro la vida. Me conto que la conocia de haberla visto en un antro, que era muy simpatica y que se llamaba Iria. Como no, el tambien estaba enamorado de ella. No me exraña: Nunca habia visto u culo como el suyo, y el resto de su cuerpo tambien era sobresaliente. Un dia que tenia examen y la maestra no llego sali del salon y me dirigi a la biblioteca para tomar algunos libros. Para mi sorpresa vi a Iria sentada en una de las mesas,al final de la biblioteca, escribiendo algo (la biblioteca es pequeña). Tan solo le di una pasada visual y empece a bajar las escaleras, pero cuando habia bajado un par de escalones, mi cerebro reacciono ante una imagen que se me quedo grabada. Pense en un engaño visual, pero...por si acaso, me coloque en una posicion en que podia ver sin ser visto y contemple a ria. MI CEEBRO NO SE HABIA EQUIVOCADO: Iria desde luego, estaba escibiendo...con una mano. ¿y la otra?
Si, demtro de su ceñido pantalon y, probablemente, dentro tambien de su pantaleta. La movia de ariba abajo, pero no podia estarse mastubado, ya que no se notaba ningun gesto delator en su bonita cara. Seguramente, solo se estaria acariciando. Ya llebaba un buen rato observando y, como ya tenia rato ahi, decidi marcharme. Pero cuando le di la ultima mirada, observe un cambio en el movimiento de su mano. Lo veia tan bien desde ese lugar que era evidente que ahora si se estaba masturbando en toda forma termine de comprobarlo cuando me fije en los leves gestos de placer en su cara. Senti que mi verga me iba a estallar y, en medio de la emocion, creo que me volvi loco y fui a su lado. No se dio cuenta de mi presencia (demasiado ocupada en lo suyo) asi que empece a hablar:

-Hola Iria, que tal?-

En una minuscula fraccion de tiempo, dejo de masturbarse, saco la mano del pantalon y se puso roja. Respiro y me dijo:

-Te conozco?-
-No, perdon, deja me presento: Me llamo Daniel, tengo 19 años, soy amigo de Miguel y aun virgen.

En ese instante volvi a la realidad. En principio no era ta grave lo que estaba haciendo, tan solo estaba presentandome. Pero casi me muero de la verguenza al darme cuenta de que le habia dicho que era virgen, ni al caso eso.

Sorprendentemente, Iria se relajo y me hablo con un poco mas de confianza:

-Asi que amigo de Miguel. Ya veo, por eso sabes mi nombre, te llamas Daniel, tienes 19 años y...y... Esta vez el que se puso rojo fui yo, pues Iria advirtio mi cometario. Como era de esperar, y ante lo incomodo de la situacion, se levanto y yaiba a cruzar la puerta cuando le dije:

-Iria, porfavor no te vayas-Se dio la vuelta y nos miramos a los ojos- Ya se que todo el mundo esta loco por ti, no te tengo que recordar que estas muy buena, pero creo que siento algo especial por tu persona, y no lo quiero echar a perder.

Se quedo callada unos instantes, cuando vi que cerraba la puerta, comprendi que mis palabras habian dado en el blanco. Se me acerco lentamente, mirandme a los ojos. Cuando estuvo muy cerca de mi posicion, llevo sus labios a mi cuello. Besandome, me susurro al oido:

-Dani... quiero que me hagas el amor lentamente...............ahora mismo!

Me quede sin palabras. Ella me seguia besando, ahora juntado nuestros labios.
Entrelazabamos nuestras lenguas, aunque yo seguia pensando en lo que vendria despues. Le hice dar unnos pasos atras y la apoye en la puerta. Iria me seguia besando y yo, enre caricias, le puse los brazoshacia arriba y quedo inmobilizada.. Estar en esa situacion con una rubia asi hacia aumentar todavia mas mi impresionante ereccion.
Aunque ya habia separado mis brazos de los suyos, a ella le inteesaba seguir teniendolos hacia arriba. Asi me permitia libertad de movimientos.
Aprobechando la verticalidad de sus extremidades superiores, le saque la blusa, y me sorprendio ver que slo llebaba el sosten. La bese de nuevo demosrandole mi amor, y acaricie sus senos, que se salian del sosten. Le quite el brassier y me recree la vista con sus pechos.

Me encantaban, sin mas, aunque no eran demasiado grandes estaban bien firmes, erguidos y eran muy bonitos, tanto que empece a lamerlos, centrandome en los pezones, ya muy duros a causa de la exitacion. Mientras, ella haia cerado los ojos para sentir mas placer y me susurraba mi nombre al oido, lo que me puso al tope de cachondo. Cuando ya di por lamidos sus sugerentes pechos, me centre en su abdomen, firme y terso, seguramente debido a largas horas en el gimnasio.

Metia mi lengua en su ombligo, y lamia en circulos en torno a el. Me centre un poco en la situacion: Me estaba dejando hacer lo que quisiera. Me levante, y tras un beso de esos de pelicula, le susurre al oido:

-Iria, eres....la chica perfecta.

Me sonrio y me devolvio el beso: -Y tu eres mi chico.

Me dedico una picara mirada que casi hace salirse mi verga del pantalon

-Explora por ahi abajo, haber que encuentras- Me dijo.

Mi tranca ya no podia mas, si no fuera por esa situacion seguro que hasta me doleria. Me tomo de la cabeza y me presiono lentamente hacia abajo para que me volviese a poner de rodillas, lo cual acepte de buen grado. Y alli estaba yo, delante de donde presumiblemente estaba su sexo, desabrochando los cierres de su pantalon ajustado. Cuando lo hice, se los quite, dejando a esa esplendorosa rubia llamada Iria en puras pantaletas. Ya podia divisar lo que se escondia detras de ellas. Una sombra tenue me aviso que cuidaba muy bien su gruta del placer, sobre todo porque despues descubriria que estaba perfectamentedepilada, dejando unicamente los vellos que no molestan, por encima del clitoris.

-Encontraste algo por ahí abajo?- Su sonrisa compaginaba perfectamente con su linda cara.

-Si.
-Me lo podrias enseñar?

La agarre por sus duras y estupendas nalgas, masajenadolas antes empezarle a bajar su lindo calzon.

Cuando lo tenia a la altura de sus rodillas, me detuve un instante para admirar su sexo: Era mejor de lo que esperaba, tanto, que creo que me enamore de ella y de su bella dueña en un instante.

Tenia unas ganas tremendas de besarla, cosa que iba a hacer cuando una suave mano detuvo mi impetu:

-Primero enseñame lo que encontraste, después ya tendras tiempo de aventurarte en mi cueva…..

Cumpli sus ordenes, me levante y le enseñe sus blancos calzones:

-Estan bien mojados, eh Iria?.

Ora vez su picara sonrisa, me estaba volviendo loco.

-Ya veo que has encontrado el tesoro, ten tu recompensa- me los devolvió- Vamos, huelelos. Huelen a sexo, a mi sexo……

Apoyo sus manos sobre mi cabeza y, con suavidad, volvio a dejar mi cara frente de su humedo sexo. Iba por fin a besarlo cuando, una vez mas, detuvo mis labios. Si no fuera porque era nada menos que Iria, me habria encabronado. Me jalo un dedo y me dijo:

-Mira, este es el explorador, la cueva ya sabes donde esta…

Me dijo tambien que deberia prepararme, que la cueva estaria muy mojada y me chupo el dedo como si chupara otra cosa. Y ahí estaba yo, delante de la raja de una rubia que estaba buenisima, y con el dedo preparado para darle placer. Empece haciendo circulitos en torno a su sexo, para después empezar la penetración. Al sentir su sexo la punta de mi dedo, se abrio levemente, permitiendo a mi “explorador” entrar sin problemas en su cueva. Cuando entro al maximo, se volvio a cerrar la cueva, emitiendo Iria un gemido placentero. Impuse un ritmo suave, cosa que me agradecio. Sentia mi dedo muy umedo, inundado de flujos vaginales. De repente se me ocurrio una idea, le saque mi dedo un momento, a lo cual me respondio con una mirada de incomprensión, y me coloque a su altura, le puse mi dedo indice en la comisura de los labios y le dije:

-En toda expedición tiene que haber una exploradora, verdad Iria?

La joven me respondio con otra de sus sonrisas y se metio mi dedo a la boca, succionandolo entero. Me volvio a arrodillar como antes y me dispuse a masturbarla de nuevo, su vagina se volvio a abrir, dando paso a mis lujuriosos dedos cuyo itmo acelere ahora e Iria empezo a retorcerse de placer, jadeando como una bestia.

Tras la incesante e implacable masurbacion ala que la habia sometido, Iria se vino en un orgasmo fenomenal, salpicandome levemente la cara y casi desplomandose sobre mi. De todas formas segui masturbandola, esta vez mas intensamente, pues queria esa tarde darle el mayor placer de su vida:

-Ahhh, que gusto me das cabron….

Se sento estrepitosamente, nisiquiera se podia mantener firme. La segui masturbando, estaba totalmente exitada, le estaba provocando tanto placer que hasta me suplico que parara y como no lo hice, inento rechazar mis dedos poniendose de espaldas, y luego comprendio que me habia otorgado una ran ventaja; ahora tenia efrente su ano, ademas de su humeda cuevita. Le meti un dedo por cada agujero, y solto un gran gemido, esta vez, no me pedia parar precisamente:

-Ahh mas, que gusto, te amo Dani, Hazme tuya….

Estuve un largo rato masturbandola intensamente, y se volvio a venir. Al acabar su placentero orgasmo, me dijo jadeando:

-Ven Dani, cogeme, cogeme ya!!! Porfavor.

Como me iba a negar? Me saque el miembro del boxer y casi con crueldad se la sumi casi con todo y huevos por la raja.
Iria me imponia un ritmo suave, y la estaba gozando enserio. Por no tener experiencia estaba cogiendo bastante bien, con lentitud. Su aun estrecha vagina me provocaba tanto placer que no pude resistirme mas y la empece a cabalgar salvaje, intensamente. La segui penetrando un ato mas hasta que acabo, agarrandose a la puerta para no caerse. Iba a seguir clavando cuando Iria, casi suplicando dijo:

-Dani, porfavor, saca tu miembro de mi vagina. Ya sabes que disfrutaria que te vinieras dentro de mi, pero puedo quedar embarazada, comprendelo cariño.

Con resignacion, la saque. Se me puso flacida, pues habia estado a punto de acabar. La espectacular rubia que estaba a mi lado me dio un suave beso en los labios y me susurro:

-Amor mio, si haces que acabe en tu boca, te doy una mamada…

¿Qué dices? Me brillaron los ojos y, rapidamente, le abri as piernas, dejando su depilada raja frente a mi ansiosa boca. Iria me volvio a deleita con una de sus maliciosas sonrisas y procedi, nuevamente, a darle placer. Mi lengua se abrio paso por el interior de sus muslos, hasta llegar a su humeda cuevita. Empece a lamer ansiosamente, desde su ano hasta su clítoris. Iria restregaba sus dedos por mi pelo, con una cara de maximo placer, maravillosa. Su vagina estaba tan humeda que supe que lo estaba disfrutando, su clítoris se endurecio, asi que aproveche para lamerlo y que toda la exitacion de su espectacular cuerpo se concentrara en un gran orgasmo mientras acababa una vez mas gimiendo como gatita en celo, su cuerpo se convulsionó en espasmos de placer, que se agotaron en un par de minutos, tiempo que le duro su largo y espectacular orgasmo.
Pero como yo estaba exitadisimo, le meti un dedo por el culo y di varias lamidas a su raja. Iria se volvio a estremecer y me lleno la cara de calientes flujos vaginales debido a su segundo gran orgasmo. Cuando se recupero me hizo sentarme y me abrio las piernas. Al ver que tenia el pene un poco flacido, saco su sugerente lengua y la paso suavemente desde mis huevos hasta la punta de mi pene, lo que hizo que tuviese al instante una ereccion descomunal. Hizo ademan de tragarsela entera, pero rectificaba y se alejaba. En una de esas, abrio la boca y se la trago, pero sin rosarla, pero otra vez se volvió a echar para atrás.
La mire con cara de incredulidad y me sonrio:

-Quieres que me la meta en la boca cariño?

Me volvi a exitar y asenti con la cabeza. Puse mi mano suavemente sobre su cabellera y dirigi su boca hacia mi instrumento. Y se la trago!!!! Primero se dedico a los huevos, sobandolos con su lengua. Luego, recorrio toda la extensión de mi pene, succionandome el glande. Me estaba dando una mamada bestial, prácticamente me estaba cogiendo con su boca. Senti como me venia el orgasmo desde los huevos,recorriendo mi tranca y soltando grandes chorros de leche. Iria solo pudo tragar un poco, pues fue todo tan rapido que mi venida la tomo desprevenida. Le inunde la cara, el pelo, incluso los pechos. Al acabar la sensacional venida, me vesti y me encamine hacia la puerta. Soo me habia despedido de Iria dandole un beso en la mejilla, pues no sabia que hacer. Antes de bajar las escaleas, eche una ultima mirada hacia aras y vi a Iria lamiendose las tetas llenas de esperma y masajeandose su sexo, fue la ulima vez que la vi…………..




salu2.