Hola!

Registrándote como bakuno podrás publicar, compartir y comunicarte en privado con otros bakuos :D

Regístrame ya!

Eso de dar clases.. tiene sus beneficios: Otra alumna con ganas

hysteria01

Becerro
Desde
27 Nov 2009
Mensajes
10
La conocí desde que ambos estudiábamos la carrera, ella iba dos semestres adelante. Me gusto desde que la vi, bajita pero de curvas muy pronunciadas, boca de labios gruesos, mirada profunda, y una carita de esas que te hacen pensar cosas malas. Un día en la sala de computadoras estaba ella haciendo algo en la compu junto con sus amigas y compañeras, yo llegue y me senté en la compu de al lado, ellas tenían un relajo tremendo. Trate de hacerle platica a ella, pero me corto gacho diciéndome “no me gusta platicar con niñitos”. –Chale- pensé yo- ps ni que estuviera tal grande ni tan vieja, o cuantos años tendrá?- yo tenia 18 años en ese entonces. Con el paso del tiempo y la interacción en la sala de computo, nos fuimos conociendo al grado de hacernos conocidos y después amigos. Un dia me pregunto –¿cuántos años tienes niño?- cuando supo mi edad se sorprendió. –ah caray, creí que estabas mas chiquito, te haces interesante- me dijo sonriendo.
Así paso el tiempo hasta que llego su graduación y por cuestiones de economía, la escuela decidió juntar ambas generaciones y hacer una sola fiesta, así que ambos nos graduamos al mismo tiempo. En la noche del baile de graduación, la saque a bailar, ella ya tenía unas copas de más, y entre baile y baile me dijo –lástima que vengas con tu noviecita, si no vieras que rico la íbamos a pasar, porque como que ya llevo rato queriendo contigo, pero pues veo que eres bien fielecito, tu te lo pierdes- yo no se si fue por las copas, o si fue en serio, pero ahí quedo todo. Cada quien tomo su rumbo, ella no se a donde se fue a trabajar y a mi me contrataron en la misma escuela como asesor y después me mandaron a dar clases a una escuela en una comunidad cercana (donde sucedió la historia que ya les conté anteriormente).
Esta escuela comenzó a tener problemas financieros( mas egresos que ingresos), y tuvieron que recortar personal y cambiarse a un local más pequeño y me dejaron a mi como único encargado, la hacía de todo, limpiaba, daba clases, de secretaria, jajaja, de todo lo que hiciera posible para seguir manteniendo la escuelita y por lógica mi trabajo.
Un día llego ella, ahí estaba en la puerta, pidiendo informes por los cursos, se sorprendió de verme, yo mas, estaba buenísima, chaparrita pero con un cuerpo bien lleno de curvas, ya no estaba tan delgada como antes, ahora estaba mejor. Me platicó que necesitaba un curso de actualización, porque desde que salió de la escuela de computación, no había tocado una sola computadora y ya no se acordaba de nada, y es que ya habían pasado como 5 años. Nos pusimos de acuerdo en un horario que le conviniera, tomo el último que era de 7 a 8 pm por cuestiones de su trabajo.
Durante las clases, ella me coqueteaba mucho, me rosaba con su mano, me tocaba discretamente con su pierna, detalles asi que nomas ponían a pensar muchas cosas, y yo pues nada tonto le seguía el juego, así pasaron como 15 días, el asunto iba rápido. Ya éramos adultos de unos 25(que adultos jejeje) .

Un día se vino un súper aguacero, que impido al muchos alumnos llegar a ese horario de clase, solo fueron unos cuantos, y por lo mismo y por la lluvia decidieron salir pronto, me pidieron autorización para hacerlo y se las dí, solo se quedo ella, - es temprano- me dijo – te espero a que cierres y te acompaño a que tomes tu bus- yo acepte, apague todo, cheke las puertas y ventanas, apague las luces y con la mano le señale la puerta para que ella saliera delante de mí, al pasar frente a mí, instintivamente la tome por la cintura y la atraje hacia mí, y repegue sus nalgas a mi pene. – ¿qué quieres?- me dijo, y se volteo y me dio un beso cachondo. Yo aproveche para agarrarle las nalgas, las tenia duras y paraditas, como mi pene en ese momento. Se separo y me dijo otra vez -¿Qué quieres?-. –¿tú qué crees?- le conteste. Y la volví a besar y a agarrarla de las nalgas y pegarla contra mi haciendo que ella sintiera mi verga que en ese momento pedía salir.
Empezamos a acariciarnos y besarnos frenéticamente, meti una de mis manos por debajo de su blusa para sentir una de sus tetas, duras y grandes, mas grandes de lo que se veían, un pezón totalmente parado. Le acariciaba las tetas, las nalgas; y cuando trate de meterle la mano en la panocha se echo hacia atrás y me dijo sorprendida -¡no!,- ¿Por qué no?- le pregunte- no puedo- me contesto- ¿Por qué no?- repuse- estoy reglando-Chale! –pensé- no pues y ora que hago- seguí pensando. Pero ella al verme callado me miro fijamente y agarro mi verga por sobre el pantalón y me dijo –pero si quieres te puedo hacer una chaqueta con la boca- y mientras decía eso comenzó a bajar el zipper de mi pantalón.- ¿no quieres?- mientras la sacaba- ¿no quieres que te la mame?- y empezó a jugar con ella- ¿quieres que te haga una chaquetita con mi boca para que no te quedes con las ganas mi amor?- mientras bajaba y subía su mano sobre mi verga a manera de chaqueta. –no sé que esperas- le dije- ¿y tu como te vas a quitar las ganas?- repunte- por mí no te preocupes papito- llego y me baño con agua fría, además después me puedo desquitar, ¿Qué no?- claro- le dije- y diciendo esto, se puso en cuclillas y de un solo bocado se metió toda mi verga en su boca y empezó a succionar de una forma que yo creo que puse los ojos en blanco y me hizo gemir fuerte, porque ella me pregunto si me había lastimado, -no- le dije – síguele- y me la comenzó a mamar tomando mi verga con una mano a manera de tomar la base de mi verga y parte de mis huevos y con su boca chupar de arriba abajo uniformemente. Con la otra mano vi que se alzaba la falda que traía y se tocaba la vagina y luego se sobaba las tetas. Sentí como mi pene se inflamaba más. – ¿te quieres venir en mi boca?- me pregunto- ¿te va a gustar?- le pregunte- no, no me gusta, pero si tu quieres pues hazlo- wao, pues que decisión tan difícil, por un lado quería vaciarle toda mi leche, que ya no tardaría tanto en salir, y por otra parte, no quería que ella hiciera algo que no le gustara solo por darme gusto a mí. Al ver que no respondía pronto se paro y me dijo. – tengo una idea mejor, porque no mejor me la metes, ¿no te va a dar asco?- Y se volteo sobre el escritorio y alzo su falta dejando ver un calzón mata pasiones, pero que se veía sexy con esas tremendas nalgas paradas que tenia. – ¿te animas? Volvió a preguntar- seria un tonto si no – le dije- y me acerque a ella bajándole el calzón con cuidado, ella me ayudo para que no sucediera un accidente, dejando su culo al aire acerque mi verga con cuidado, ella la tomo y la dirigió hasta la entrada de su panocha y me dijo, -ahí está, métemela- y vamos! Que se la empujo, la sensación entre mojado y pegajoso y el saber que había sangre ahí, se sintió rara, pero no desagradable, quizá porque estaba yo muy caliente, pero me valió gorro y empecé a bombear, -¡que rico cojes papi!, no pares- dijo excitada- eso me prendió mas, me olvide si sentía raro, que si estaba reglando, que me iba a ensuciar, se me olvido todo, con solo escuchar – ¡qué rica verga tienes! Métemela, cojeme!- enardeció mis sentidos y empecé a metérsela una y otra vez, ella paraba el culo y me seguía diciendo esas palabras cachondas, -¡cojeme papi, cojeme, que rico cojes!- eso hizo que no soportara mucho tiempo y me vine dentro de ella.
Estuvimos un instante así tratando de recuperar el aliento, después me separe de ella cuidadosamente y al sacar mi verga se escucho que cayó algo al piso, era mi semen mezclado con sangre. Me quede yo creo que sorprendido, porque ella rápidamente se volteo y se acerco a mí.
-Que rico lo haces papi, y que lindo que no te importo que yo estuviera así, es cuando estoy más cachonda y a los hombres no les gusta una vieja así, pero tú eres distinto papi, gracias.- y me dio un beso tierno.
Como estábamos cerca del baño, me fui hacia allá, prendí la luz y pues estaba muy manchado, no me causo desagrado ni asco, simplemente estaba sorprendido, no podía creerlo, pero recordé que ya antes me había pasado algo así, solo que estaba yo muy chaval para entenderlo, fue con una señora de 35 años, una historia que después les contare.
-Pásame el papel por favor- me dijo, arrancándome de mis pensamientos- estoy súper escurrida de todo- me dijo- ¿de todo?- le pregunte –si, de todo,¿ que no te diste cuenta que me vine papacito?- uy, eso si que me gusto saberlo, porque yo nomas estaba pensando en lo que estaba sintiendo yo.-estoy escurriendo de la venida que me hiciste dar, de mi regla y de tus mocos- me decía al tiempo que se limpiaba. Yo tomaba agua del lavabo para tratar de lavarme un poco, después me limpie con papel, nos arreglamos la ropa y salimos campantemente felices y sonriendo.
¿De verdad no te dio asco o algo asi?- me dijo en la parada del bus- no, de verdad, si me saque de onda, pero no por asco- le conteste- ¿seguro?- me dijo de nuevo- ¡seguro!- asentí- que bueno papi, me da gusto, yo lo disfrute mucho. Cuídate, ya viene tu bus, báñate antes de dormir. Me beso en la mejilla y nos despedimos.

Al otro día llegue temprano a la escuela para revisar que no hubiera rastros de la aventura. Y si, si había, estaba lo que había caído cuando se la saque, un enorme coágulo de sangre con semen, en la mesa manchas de sangre y gotas en el piso, en el baño bastante papel manchado, el lavabo también, en fin, tuve que retrasar la entrada a la primera clase una media hora en lo que terminaba de limpiar.
Ella no fue ese día ni el otro, hasta la siguiente semana. Le pregunte si le había pasado algo, me contesto que no, solo que tuvo que hacer otras cosas y que quiso aprovechar que estuvo relajada para hacerlas. El resto de la semana paso normal, pero ya no hubo coqueteos de parte de ella y yo trate de no hacerlo para no verme tan perro. A la siguiente semana yo tuve que asistir a un curso de capacitación a personal que duraba 3 días, por lo que me ausente de la escuela. Se suspendieron las clases hasta el próximo lunes.
El lunes llego, ella llego muy guapa, con un pantalón de vestir negro y pegadito que hacían ver sus nalgas bien paradas, botas y chamarra; me miro muy seria y se paso directamente a su clase. Le lleve su actividad, y se puso a trabajar. Llego la hora de la salida, empezaron a salir y ella seguía trabajando, yo fui apagando poco a poco las compus, hasta que solo quedo ella, guardo su trabajo, apago la compu y me dijo-te espero- sale pues- le conteste- y me apure, y como la vez anterior, antes de salir y apagar la ultima luz, ahora ella se acerco a mí y me rodeo el cuello con sus brazo y me planto un beso –ahora yo tengo ganas- me dijo, y agarro mi verga y me empezó a acariciar mientras me besaba cachondamente. Correspondí a sus besos y al manoseo, esta vez me fui directamente a su panocha, se la empecé a tocar por encima del pantalón, se sentía húmeda, desabroche su pantalón y baje el zipper y metí mi mano dentro de su calzón a manera de tocarle la vagina; esta vez traía un bikini combinado con encaje, muy apretadito el calzón, porque no me dejaba meter mi mano a gusto.
Ella se dio cuenta de eso y entre abrió las piernas y mi dedo prácticamente fue devorado por su vagina, estaba escurriendo, y se le sentía una mata de pelos gruesos que de solo acordarme quisiera sentirla de nuevo. La empecé a dedear sintiendo como se escurría y mojaba mi mano mientras me besaba y acariciaba mi verga y sentía como se agitaba su respiración cada momento más.
De pronto se separo de mi, jalo una silla y se sentó y se comenzó a quitar el pantalón, se quedo solo con sus botas puestas y su blusa, que para ese momento ya estaba a medio pecho con el brasier volteado hacia arriba dejando a medias ver sus tetas. Abrió las piernas y me dijo –quiero que me cojas- dicho y hecho, me desabroche el pantalón y me lo baje y me hinque frente a ella a manera de que mi verga apuntara directamente a su panocha, se echo hacia delante para facilitarme la acción y se la empecé a meter, despacio primero y poco a poco empecé a aumentar el ritmo. Ella gemía, después alzo sus piernas y me enredo con ellas la cintura y se recargo en el respaldo de la silla y alzo la pelvis, eso hizo que su panocha se pegara bien contra la base de mi pene, -así, así siento rico- me dijo- ¡cojeme!- y la empecé a bombear. –¡Que rico cojes papi, me gusta cómo me cojes, sígueme cojiendo, no pares de cogerme!- me decía. Y yo dándole duro, tratando de no escuchar, porque de solo escuchar su voz cachonda y lo que me decía, hacia que sintiera ganas de venirme en ese instante. Sentí que mi verga se inflamaba dispuesta a escupir todo lo que tenía guardado. Ella se detuvo y me dijo, -espérate papi, no te vayas a venir todavía- me pidió que me retirara tantito y se paro. –ahora siéntate tu- me dijo- yo obedecí y me senté. Ella se volteo, con sus manos abrió sus nalgas y se sentó sobre mi verga cuidadosamente buscando atinar la entrada de su vagina y la punta de mi pene. Cuando sintió que ya se había acomodado, se dejo caer de un solo sentón que me hizo sentir dolor y placer, bajo mi prepucio de un golpe, aplasto mis huevos y casi machaca mi verga con ese tremendo sentón. Así se quedo un rato como adivinando que me había lastimado un poco y después empezó a moverse hacia arriba y hacia abajo, bombeándose ella sola, recorriendo de arriba abajo mi toda mi verga con su panocha, se movía de tal manera que se sentaba completamente sobre ella y se alzaba hasta solo dejar la cabeza justo dentro de la entrada de su panocha. Y así estuvo, dándose ella sola y yo disfrutando de la sensación y de ver su culo tragándose toda mi verga. –¿Sientes rico?- me pregunto. –Riquísimo mamacita, no pares-. Y ella obedeció ahora y se siguió dando de sentones de una manera fenomenal, al tiempo que me decía lo rico que sentía y lo mucho que le gustaba mi verga, que no dejara de cojermela y que no me fuera a venir todavía.
Después de un rato, se paro y me dijo, -tírate al piso, se me antoja a mi arriba- y puescomo en ese momento solo obedecía, ya que ella estaba haciendo prácticamente todo, yo solo me concentraba en disfrutar y en no venirme. Me tire al piso y se poso sobre mí, esa noche vi lo rica que tenía su panocha, peluda, pero con unos pelos grandes que la hacían ver estupendamente sensual, una piel blanca, un ombligo coqueto, los pelos casi le llegaban al ombligo en un caminito de tentación. Se monto en mi y empezó a moverse a manera de que mi verga entrara y saliera en su panocha al mismo tiempo que yo me aferraba a su par de tetas más o menos grandes, serian como talla 34, se las mamaba y mordía sus pezones mientras ella se concentraba en meterse mi verga dentro de ella.
Paso otro ratito así y se levanto y se volvió a sentar en la silla volviendo a abrir sus piernas invitándome con sus manos a que la penetrara así otra vez. Yo obedecí y me puse entre sus piernas, pero esta vez le levante las piernas hasta mis hombros dejándome acceso total a su panocha y se la empecé a meter fuerte pero no rápido, ella gemía a cada metida que le daba y me mordía los oídos y besaba mi cuello. –¡así papi, así cojeme! ¡Que ricos cojes!. No soporte mas y me vine, sentía que mi verga botaba mas semen de lo habitual y que no dejaba de salir mientras ella solo decía – que rico-.
Me quite y busque papel higiénico en el baño para limpiarme, ella se acomodo su pantalón y su blusa, me alcanzo y me abrazo y me dijo – pinche <mi nombre>, me iba yo a encabronar contigo si no aceptabas coger conmigo otra vez- ¿Por qué? - le pregunte - porque pensé que ese día solo había sido una pinche calentura tuya, tanto que hasta te valió madres que estuviera en mis días con tal de metérmela. -¿Cómo puedes creer eso?-le dije- si sabes que desde que estudiábamos la carrera me has gustado y además si no mal recuerdo hubo una insinuación tuya en la noche de graduación, siempre me has gustado, pero ahora estas mejor, mucho mejor que cuando te conocí. -¿a poco si?- me contesto- claro- le dije- y no solo eso, cojes como una diosa- mentiroso- me contesto- de verdad, cojes bien rico- le conteste- pues tu no te quedas atrás, me gusta como cojes, te mueves bien rico- volvió a decir, -que bueno que te gusto, porque a mí me encanto- le conteste. Y me dio un fuerte y largo beso. Terminamos de acomodamos la ropa y de nuevo me fue a dejar a la parada del bus.
A la semana siguiente me dijo que la habían cambiado de lugar de trabajo y que se tenía que ir a otra ciudad y ya no iba a terminar el curso. No hubo despedida porque fue de sorpresa su cambio. Quedamos en volvernos a ver. Y si sucedió tiempo despues, pero eso, eso es otra historia.

Gracias a todos los amigos bakunos que dejan sus comentarios y a toda la cantidad de visitantes que han visto mis relatos. Los comentarios que me animan a postear mas relatos. Al hacerlo, me acuerdo de esos buenos tiempos de aventura y locura. Gracias de verdad.:metal:
 
quien quisera ser como tu bro no ma q suerte la tuya carnal
jejejejej sigue con tus relatos son de lo mejor unas experiencias inimaginables y mas hasta parecen peliculas esperamos mas d tus aventuras bro
sigue asi
 
De los mejores relatos bakuno! me considero tu fan, escribes pero si bien cabron!
 
Excelente relato bro aunque dejame decirte que si esta cabron dejarsela ir en sus dias y sin globito (esta de pensarse) pero bueno en ocasiones con la calentura suele suceder queno pensamos con la cabeza de arriba sino con la de abajo ynos dejamos llevar por el momento de pasión. Gracias por compartir.
 
Muy buen relato :vientos::baba: ... muchas gracias por compartirlo :):)... :metal:
 
No manches men este relato no tiene madre y como dices eso de el beso del papayon si es algo raro te quedas fuera de tus cavales pero despues analisas y piensas que se siente riko jeje pero bueno grax x el relato y aver si posteas el otro no mn esperando.........
 
Volver
Arriba