Suena mi celular…

A: Si, diga.

G: ¡Hola Papi, buen día!

A: ¡Buenos días mi hermosa princesa!

G: Soy tu mujer ¿Recuerdas que me hiciste tu mujer? – Dice con un tono coqueto.

A: Cómo olvidarlo bebé, sabes una cosa te amo y te extraño muchísimo.

G: También te amo Papi, quiero verte, sentirme en tus brazos, sabes además hoy estaré solita en mi trabajo, ven saliendo a verme sip, tendré cerrado me tocas.

A: Encantado mi hermosa mujer, ahí te veo, dime ¿Te dejarás hacer cositas ricas?

G: Sip, además nos comeremos nuestras cositas ricas, tú te comes mi quesito y yo tu cosita.

A: ¿Mi cosita? Dile por su nombre bebé.

G: Bueno Papi, está bien, me comeré tu verga…

A: Oye bebe, ¿dime te depilaste tu quesito como le prometiste a tu papi?

G: Sip papi está depilado para ti.

A: Sabes te tomaré fotos sexys.

G: Papi no, me da pena, bueno tómame pero poquitos sip.

A: Si bebe serán poquitas fotos y unos minutos de video sip

G: Sip papi pero solo poquito porque me da pena.

A: Pero bebé papi ya conoce tu bello cuerpo.

G: Ok papi me dejaré.

A: Por eso me encantas mi amor. Te veo al ratito, extráñame.

G: Te espero con ansías.


Terminadas mis labores, voy corriendo a su trabajo, llego y toco la cortina del local. Escucho adentro su suave voz preguntando si soy yo, a lo que respondo afirmativamente; ella abre la puerta…


G: ¡Pasa rápido Papi, para que no nos vean! – Dice mientras asoma a ver que no haya curiosos afuera. Adentro se cuelga de mi cuello y nos damos un beso apasionado, de inmediato rodeo su cintura y mi otra mano bajo hasta acariciar sus nalgas.


G: ¡Vienes ganoso Papi eh!

A: Así me pones princesita, me enciendes con solo decirme Papi.

G: ¡Papi te amo, papi, papi! – dice mientras me abraza cariñosamente

A: Oye bebé, recuerdo que una princesita hermosa me prometió algo.

G: ¿Quién será y qué será? – responde de forma juguetona.


La levanto y abrazo fuerte, ella me abraza con sus piernas, la llevo al escritorio, la siento y la comienzo a besar y acariciar, desabotono su blusa, ella emite pequeños gemidos y se deja llevar, empieza a temblar de nervios y emoción. Sus manos buscan mi verga dura, la cual dentro del pantalón ya está lubricada, tomo su mano y le indico que me baje el cierre, ella obedece, desabrocha el cinturón, se pone de pie y me baja el pantalón, yo hago lo propio con el suyo, al agacharme puedo sentir su rica vagina en mi cara aún con su tanga puesta, le doy un beso así mientras ella emite un gemido placentero y me toma de los cabellos…


G: ¡Si Papi, me encanta! – dice mientras con mis dientes bajo su tanga, esto es algo que siempre le enloquece. Tomo su tanga con mis manos y la huelo, ella se sonroja, quito su sostén y comienzo a comer de sus hermosos pechitos…


G: Así papi, cómeme, eres mi bebé de pecho, ¿Te gusta la lechita de mis pechitos papi?

A: Me encantas princesa, dime ¿Quieres ser la putita de Papi?

G: Si papi, soy tu putita, solo tuya Papi, tu putita quiere verga. – dice con voz entrecortada.

A: ¿Dónde la quieres putita?


G: En mi quesito Papi métemela toda papi, no aguanto, dámela ya…

A: Si, pero antes mi putita se comerá su verga, ¿la quieres?

G: ¡Si papi, quiero tu verga rica! Me la comeré toda papi. –Enseguida se hinca y comienza a dar pequeños besos en mi verga lubricada, la toma con sus dos manos y la mueve con fuerza.

G: Papi está durísima y jugosa.

A: ¿Te gusta putita?

G: Me encanta papi, ¿dime es mía esta verga?

A: Toda tuya bebé…


Comienza a chupar mi verga húmeda con cierta timidez, puedo sentir lo caliente de su boquita, con una de sus manos soba mis bolas, deja de chupármelo y comienza a chupar mis bolas…


G: Me gustan tus bolitas papi.

A: Dame mamadas ricas de verga bebé, ¿Te da asco?

G: Poquito papi, pero me la comeré toda como te lo prometí – Ella como recordarán no tenía experiencia en sexo, era virgen, yo soy el afortunado que le enseña.

Dicho lo anterior comienza a mamar de forma suave, poco a tomando confianza y lo hace mejor, de a momentos la deja y se le queda viendo y vuelve de nuevo a la acción.


A: Me enloqueces bebé, me encanta tu boquita comiendo verga.

G: ¿Te gusta papi, así papi, así me como tu verga? – dice mientras continúa mamando.


Yo por mi parte la tomo de la cabeza para guiarla y que ella continúe dándome ese placer indescriptible que solo con su boquita pude alcanzar, tal vez por la ternura con lo que siempre lo hacía.


La levanto y ahora me hinco yo, toma una de sus piernas y la subo en mi hombro, luego mis manos agarran sus nalgas y le digo: ¿Estás lista bebé para darme tus juguitos?


G: Si papi, cómeme toda, me quiero venir en tu boquita.


Comienzo a chupar de su rica vagina aún estrecha y recién estrenada por mí en su primera vez hace apenas unos días, meto mi lengua lo más que puedo, con mi boca doy mordidas a su labios vaginales y chupo mientras ella se retuerce y emite gemidos cada vez más fuertes, ya no importa si la gente que pasa por afuera nos pueda escuchar, estamos decididos a disfrutar el momento.


G: Así papi, cómete mi quesito ¿Te gusta mi quesito papi? Es tuyo papi, cómelo todo.

A: Me enloquece tu quesito bebé, es delicioso, vente en mi boquita putita si, dame tus juguitos.

G: Si papi, dame papi, papi dame verga por favor, ya no aguanto quiero venirme teniéndote dentro de mí, dámela papi por favor la quiero toda. – exclama excitadísima, ante tal petición siento como mi sangre hierve y mi verga vibra aún más. Veo su vagina lista para ser penetrada. Pongo mi verga en su entrada mientras ella grita de placer y se empuja hacia mí. Mis manos van hasta sus pechos y los aprieta con fuerza.

Continúa la Segunda Parte en: http://www.ba-k.com/threads/en-la-oficina-con-gema-con-fotos-segunda-parte.4098678/