Afiman Inegi y Coneval que pobres en el País pasaron del 35.6% al 39.8% de la población

EL NORTE / Staff

Monterrey, México (31 enero 2010).- De abril del año pasado a la fecha, la vida cambió para la familia de Clara Gámez, vecina de la Colonia Haciendas de Escobedo, en ese municipio de Nuevo León.

Desde entonces, cuando perdió su empleo, su familia ha tenido que satisfacer sus necesidades con sólo una fuente de ingresos, los 7 mil pesos al mes que gana su marido trabajando en una casa de empeño, lo que los ha obligado a olvidarse de paseos, idas al cine, vacaciones y hasta gustos en la despensa.

"Ahora tengo que llevar menos despensa, y pues los que se dan cuenta son las criaturas, que no sabe uno cómo decirles que no hay", comenta.

Aunque Nuevo León no es de los Estados más afectados por la disminución de la clase media, historias como la de Clara se han multiplicado en el País en los últimos dos años, en los que la crisis ha ido empujando a millones de mexicanos a la pobreza.

Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) basados en los resultados de la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto en Hogares del Inegi, el número de mexicanos en situación de pobreza patrimonial pasó de 44.7 millones en el 2006 a 50.5 millones en el 2008.

Esto implica que en sólo dos años, 5.8 millones de mexicanos pasaron a carecer de los recursos para, además de alimentarse, hacer los gastos necesarios en salud, vestido, vivienda, transporte y educación.

"Ya no los llevo con pediatra", dice la señora Gámez.

"Tengo que buscar lo más económico en el doctor. Las medicinas igualmente".

Así, la proporción de mexicanos en pobreza patrimonial pasó de 35.6 a 39.8 por ciento, es decir que cuatro de cada 10 mexicanos se encuentra en esta situación.

Los mismos datos del Coneval indican que en esos dos años, la cifra de mexicanos en situación de pobreza alimentaria, es decir, que sus ingresos no son suficientes para adquirir una canasta alimenticia básica, pasó del 13.8 por ciento al 18.2 por ciento de la población.

En números absolutos, los mexicanos que no tienen dinero ni para comer pasaron de 14.4 a 19.4 millones.

Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi, entre el 2007 y el 2008, 864 mil mexicanos se incorporaron al autoempleo, la informalidad o la subocupación, mientras que los trabajadores que ganan dos salarios mínimos o menos pasaron del 33.6 por ciento en el 2008 a poco más del 36 por ciento en el 2009.

Miguel González Ibarra, director del Centro de Estudios Financieros y de las Finanzas Públicas de la UNAM, explicó que la clase media en México se caracteriza por destinar parte de su ingreso a pagar servicios que el Gobierno no otorga eficazmente.

Araceli Damián, investigadora de El Colegio de México, señaló que la crisis reciente ha pauperizado a este sector a niveles que aún no se terminan de medir.

Con información de Rocío Galarza


Se nota que felipillo esta haciendo bien su trabajo... :tomate: