Wild Sword
Bovino Milenario
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Alguna vez, una de mis tías, que vive en el bello estado de Guanajuato, me contó algo que le pasó por demás intrigante, se los platico y a ver q les parece:
Ella me platicó que un día se enojó con su hija por "equis" circunstancias, mi tía tiene un carácter muy fuerte y no es raro q se ande enojando con medio mundo pero los q la conocemos sabemos muy bien q no es mala persona, sólo q si es muy enojona. Entonces ese día se molestó como pocas veces con su hija q ya es casada y con hijos, pero contrario a ella, tiene un carácter muy amable y apacible, raras veces se enoja. Mi tía ya iba molesta por una situación con otras personas y cuando fue a visitar a mi prima a su casa, ahí sucedió algo que, como dicen, fue la "gota q derramó el vaso"
Mi tía le dijo cosas muy feas a su hija por su coraje y se salió de su casa, pero en el camino de regreso, como que le comenzó a dar remordimiento por haberse desquitado con mi prima de su coraje y pensó que eso no estaba bien, que al otro día iría a visitarla y a disculparse.
Pensando en eso, pasó cerca de una iglesia y quizo pasar a rezar un poco para tranquilizarse y pedir perdón a Dios por su mal carácter. Así lo hizo, eran justamente las 12 del medio día y no habia alguien en el interior de la iglesia, estaba completamente vacía. Hacía mucho calor y al entrar al templo sintió de inmediato una frescura muy reconfortante. Caminó y se sentó en una de las bancas de madera de hasta adelante, se incó y se persignó para dar comienzo a su oración. Tenía escasos 10 minutos de entregarse a sus rezos con mucho fervor cuando comenzó a sentir más calor que afuera y escuchó claramente unos pasos de alguien que acababa de entrar tambien a la iglesia. Eran unos pasos muy lentos, como cansados o precavidos, pero se escuchaban pesados y como si trajeran tacones o algo duro en los pies, casi casi como los sonidos que harían las pezuñas de un caballo o algún animal parecido al caminar por el piso de mármol, mi tía en ese momento no le dio mucha importancia a ese detalle y siguió con sus oraciones pues pensó que era otra persona la que había entrado y "sintió" claramente como los pasos llegaron hasta la banca que estaba atrás de donde estaba ella y escuchó como si alguien muy pesado o cansado, más que sentarse, se dejó caer sobre la banca, incluso hasta la movió al hacerlo, escuchándose claramente el ruido de la madera al ser arrastrada sobre el suelo.
Mi tía interrumpió sus oraciones al pensar:
"Vaya, esa señora (mi tía pensó q era una señora por el sonido que escuchó de sus pisadas, ella primero lo interpretó como ruido de tacones) que se sentó atras de mí si que ha de estar muy gorda, hasta movió la banca al sentarse"
Y enseguida reanudó sus rezos pero no pasaron ni cinco minutos cuando me tía comenzó a sentir más calor y la "señora" que estaba sentada atrás de ella comenzó como a patalear y a arrastrar los pies sobre el suelo, haciendo cada vez más ruido, después empezó como a gruñir, como si estuviera enojada y maldijera entre dientes, aunq mi tía no distinguía lo q decía, y movía la banca y hacía muchos ruidos.
Mi tía, incapaz de seguir con sus oraciones debido a que esos sonidos la molestaban, pensó:
"Esa señora nomás vino a interrumpirme ¿Pues q tanto hace?"
Y para sus "pocas pulgas" se volteó para reclamarle y pedirle que no hiciera tanto ruido pero al hacerlo no encontró a alguien atrás de ella, ni siquiera en toda la iglesia, ella era la única q estaba ahí, pero si se fijó q las tres hileras de bancas de atrás estaban movidas, como chuecas y se notaba como un humo y un olor extraño.
Enseguida se volteó de nuevo hacia el altar y siguió rezando, aún con más fervor, pidiéndole a Dios que la cuidara y le ayudara a ser menos iracunda.
Eso fue lo q sucedió, así me lo contó mi tía, que les pareció el relato?
Gracias por tomarse el tiempo de leerlo, saludos a todos y que estén bien de salud, q es lo más importante =^_^=
Ella me platicó que un día se enojó con su hija por "equis" circunstancias, mi tía tiene un carácter muy fuerte y no es raro q se ande enojando con medio mundo pero los q la conocemos sabemos muy bien q no es mala persona, sólo q si es muy enojona. Entonces ese día se molestó como pocas veces con su hija q ya es casada y con hijos, pero contrario a ella, tiene un carácter muy amable y apacible, raras veces se enoja. Mi tía ya iba molesta por una situación con otras personas y cuando fue a visitar a mi prima a su casa, ahí sucedió algo que, como dicen, fue la "gota q derramó el vaso"
Mi tía le dijo cosas muy feas a su hija por su coraje y se salió de su casa, pero en el camino de regreso, como que le comenzó a dar remordimiento por haberse desquitado con mi prima de su coraje y pensó que eso no estaba bien, que al otro día iría a visitarla y a disculparse.
Pensando en eso, pasó cerca de una iglesia y quizo pasar a rezar un poco para tranquilizarse y pedir perdón a Dios por su mal carácter. Así lo hizo, eran justamente las 12 del medio día y no habia alguien en el interior de la iglesia, estaba completamente vacía. Hacía mucho calor y al entrar al templo sintió de inmediato una frescura muy reconfortante. Caminó y se sentó en una de las bancas de madera de hasta adelante, se incó y se persignó para dar comienzo a su oración. Tenía escasos 10 minutos de entregarse a sus rezos con mucho fervor cuando comenzó a sentir más calor que afuera y escuchó claramente unos pasos de alguien que acababa de entrar tambien a la iglesia. Eran unos pasos muy lentos, como cansados o precavidos, pero se escuchaban pesados y como si trajeran tacones o algo duro en los pies, casi casi como los sonidos que harían las pezuñas de un caballo o algún animal parecido al caminar por el piso de mármol, mi tía en ese momento no le dio mucha importancia a ese detalle y siguió con sus oraciones pues pensó que era otra persona la que había entrado y "sintió" claramente como los pasos llegaron hasta la banca que estaba atrás de donde estaba ella y escuchó como si alguien muy pesado o cansado, más que sentarse, se dejó caer sobre la banca, incluso hasta la movió al hacerlo, escuchándose claramente el ruido de la madera al ser arrastrada sobre el suelo.
Mi tía interrumpió sus oraciones al pensar:
"Vaya, esa señora (mi tía pensó q era una señora por el sonido que escuchó de sus pisadas, ella primero lo interpretó como ruido de tacones) que se sentó atras de mí si que ha de estar muy gorda, hasta movió la banca al sentarse"
Y enseguida reanudó sus rezos pero no pasaron ni cinco minutos cuando me tía comenzó a sentir más calor y la "señora" que estaba sentada atrás de ella comenzó como a patalear y a arrastrar los pies sobre el suelo, haciendo cada vez más ruido, después empezó como a gruñir, como si estuviera enojada y maldijera entre dientes, aunq mi tía no distinguía lo q decía, y movía la banca y hacía muchos ruidos.
Mi tía, incapaz de seguir con sus oraciones debido a que esos sonidos la molestaban, pensó:
"Esa señora nomás vino a interrumpirme ¿Pues q tanto hace?"
Y para sus "pocas pulgas" se volteó para reclamarle y pedirle que no hiciera tanto ruido pero al hacerlo no encontró a alguien atrás de ella, ni siquiera en toda la iglesia, ella era la única q estaba ahí, pero si se fijó q las tres hileras de bancas de atrás estaban movidas, como chuecas y se notaba como un humo y un olor extraño.
Enseguida se volteó de nuevo hacia el altar y siguió rezando, aún con más fervor, pidiéndole a Dios que la cuidara y le ayudara a ser menos iracunda.
Eso fue lo q sucedió, así me lo contó mi tía, que les pareció el relato?
Gracias por tomarse el tiempo de leerlo, saludos a todos y que estén bien de salud, q es lo más importante =^_^=