Como comente en mi primer relato soy gordito tengo 31 años, mido 1.73m y mis infidelidades comenzaron por curiosidad en una página de clasificados, soy de Toluca Edo. de Mex. Quizas mis relatos sean cortos pero son aventuras reales que he tenido la suerte de vivir.

La siguiente semana de mi aventura con Ana recibí otra propuesta de una señora que decía tener 42 años y me comentaba que estaba emocionalmente destrozada y físicamente descuidada, yo le respondí que no me importaba el físico si no que ella estuviera dispuesta a tener una aventura, le describí como era y ella acepto. Quedamos en vernos en un centro comercial cercano a la terminal. Como la primera vez llegue temprano, la vi llegar y la aborde.

Ella es una señora de aprox. 1.65 y con sobre peso al igual que yo me acerque y ella se apeno le dije: no me importa tu físico pues como dije lo que busco en realidad son mujeres dispuestas a pasar un agradable rato de sexo, pasión y lujuria, sin compromisos y libre de enfermedades. Tú decides y si te arrepentiste no hay problema, si gustas tomamos un café o simplemente me alejo de ti y no pasa nada. Dijo que le daba miedo pero se arriesgaría.
Tomamos un taxi que nos llevo a uno hotel.

Ya estando dentro de la habitación ella aun se sentía apenada por estar con un hombre más joven que ella y me pidió que lo hiciéramos con las luces apagadas. Le dije que a mí me encantaba ver la piel de las mujeres y su rostro al hacer el amor, así que puse luces de baja intensidad para que sintiera confianza y al mismo tiempo yo podía verla.
Nos desnudamos, la abrace y comencé a besarla en los labios, poco a poco ella fue cediendo mientras yo tocaba sus pechos y su vagina con una mano, así seguimos hasta que la sentí mojadísima y su cuerpo se meneaba al ritmo de mi dedo introducido en ella. La recosté sin dejar de masturbarla y casi inmediatamente tuvo su primer orgasmo convulsionando todo su cuerpo. Tomo un respiro y me comenzó a masturbar, después de unos minutos me dijo:
-¿Quieres que te haga sexo oral?
---Claro me encanta ese es mi vicio.
Y me comenzó a lamer el pene de manera torpe, me sorprendió que no supiera hacer un buen oral con la edad que tenia (con el tiempo y los encuentros a mejorado mucho aunque aún le falta para mi gusto). Aun con esto yo estaba súper excitado por lo que mi pene estaba lubricadisimo, así que le dije:
---No aguanto más quiero hacerte mía.
Ella se acomodo en la cama con las piernas abiertas y le dije:
---Quiero hacértelo de perrito pero acá (en el piso cerca de un mueble)
Ella se bajo de la cama y sumisamente se acomodo como yo le indicaba.
Inicien con el mete y saca, ella gemia de manera suave e intentaba reprimir sus gemidos... apenas llevábamos como cinco minutos cuando gimió fuertemente y se volvió a convulsionar, sentí como se escurría y esto me éxito aun mas, me encanta hacer sentir orgasmos a la mujer es la máxima satisfacción para mí el tener relaciones.
La penetre profundamente y espere a que terminara, después me apoye en el mueble y me levante ligeramente con esto la pude penetrar más profundo y en un ángulo diferente, la embestía fuertemente.
---¿poque no gimes? veo que intentas hacerlo y te reprimes
-Esque a mi marido no le gusta que sea escandalosa.
---Pero yo no soy tu marido, ademas estas aqui para salir de la rutina ¿o no?
-Tienes razon, pense que te molestaria.
---Para nada si tienes ganas de gritar haslo, si quieres decir palabrotas igua, se trata de disfrutarlo.
-haaa!!! palabrotas no me gustan, haaaa!!
-Asiii!! que rico siento,
Al ver que perdio el pudor le di unas nalgadas y ella solo decía:
-Que rico lo haces, nunca me lo habían hecho así. Maaas fuerte asiii, asiiii, hay que rico.
---Eso es disfrutalo, gime mamita.
-Puedo decirte bebe?? mmmgggg.
---Puedes decirme como quieras
-Que rico pene tienes bebe, haaaa, asiiii, haaaayy, que rico.
---mi marido nunca me lo hace asi, mmmggg, dame mas bebe, mmmgggg.
La hice terminar tres veces más en esa posición y después le dije que se recostara boca arriba dejando las nalgas en una esquina de la cama, le levante las piernas y continúe penetrándola.
-Haaaaggg!! Que rico ¿siempre lo haces asi? mmmgggg!! Qué bien te mueves mi bebe. mmmm. Creo que me haré viciosa de ti.
-Haaaagggg!! ¿Que hare cuando te necesite? ¿Quién me cumplirá tan rico como tu? haaaggg, asi bebe asiiiii haaaa!!
Le dije que cuando quisiera me contactara nuevamente y nos volviéramos a poner de acuerdo para vernos.
Termino otras dos veces en esa posición, después me pidió que se lo hiciera de misionero, no hablamos mas y seguimos teniendo sexo, la hice terminar dos veces más y me pidió que la dejara descansar.
Mientras descansaba le toque los pechos y después se los chupe, poco a poco fui recorriendo todo su cuerpo con mi lengua, le lamí el cuerpo varias veces y me dijo:
-ahora yo quiero hacerte gozar a ti mi bebe.
Me recosté y ella recorrió mi cuerpo con su lengua, después se monto en mi y comenzó a cabalgar sobre mi pene, termino dos veces más y como estaba sobre mi, sus jugos se escurrieron por mis testículos y mi ano. Esto me éxito demasiado y terminamos juntos.
Vio la hora y se percato de que ya llevábamos tres horas teniendo sexo, yo me quede con ganas de mas pero no pudimos debido a que su esposo comenzó a llamarla constantemente preguntándole en donde estaba, nos bañamos, vestimos y salimos del hotel la subí a un taxi y yo me fui a dar la vuelta, tenía esa noche libre pues mi esposa no estaba en casa. A llegar cheque el correo y vi que ella me había escrito, diciéndome que hacía mucho que no tenía relaciones sexuales pues su esposo le había sido infiel y ella ya no le permitía tocarla. Con el tiempo y los encuentros la convencí de darle oportunidad a mi socio e incluso que le dijera que ella también le había sido infiel. Esto los llevo a reconciliarse y disfrutar de su sexualidad como nunca por lo que me ha contado. Y hasta la fecha seguimos dándonos nuestras escapadas cuando alguno de los dos tiene ganas y se puede.

También tenía otra invitación en mi bandeja de entrada pero esa es otra historia que contare si recibo comentarios, pues nadie opino en el relato anterior a pesar de tener varias visitas.