Existe un síndrome que consiste en sentir placer y orgasmos espontánea y de forma persistente; lo que podría resultar placentero, puede convertirse en una pesadilla


El Síndrome de Excitación Sexual Persistente (PSAS por su nombre en inglés Persistent Sexual Arousal Syndrome) es un trastorno que sólo afecta a mujeres. Se trata de una excitación genital espontánea y persistente, a veces puede estar acompañada de orgasmos y puede no estar relacionado con ningún tipo de deseo sexual.

¿Qué es y cuáles son sus causas?

Este síndrome comenzó a documentarse a partir de la experiencia de una mujer estadounidense que es capaz de tener hasta 300 orgasmos al día. Ahí es cuando comienza a pasar de lo normal o del placer, al horror y a la pesadilla. Esto le trajo problemas en sus trabajos y con todas sus parejas.

A diferencia de la ninfomanía o hipersexualidad (cuando las mujeres tienen un apetito sexual exagerado o que rebasa los límites de la "normalidad" y el sexo se convierte en eje de sus vidas), en el PSAS las mujeres nunca se sienten satisfechas sexualmente.

La excitación puede durar horas, días o meses, y los orgasmos se producen uno tras otro, pero sólo calman los síntomas por un momento, para regresar más tarde.

Una de las causas puede deberse a una irregularidad en los nervios sensoriales y se han encontrado más coincidencias de ello en las mujeres post menopáusicas o aquellas que llevan a cabo algún tratamiento hormonal.

También se han diagnosticado casos en mujeres que han abandonado los antidepresivos que alguna vez les recetaron.

La mayoría de las veces, la terapia física también va acompañada de terapia psicológica, debido a que quien padece el trastorno se siente angustiada y avergonzada con lo que le ocurre.

Aunque no tiene cura, sí puede tratarse. El tratamiento esta enfocado más en el control que en la eliminación del problema, ya que esto puede ocurrir de nuevo.

Inicialmente se puede anestesiar o enfriar el área y proporcionar relajación a la musculatura del piso pélvico, luego puede ser bien llevado mediante un tratamiento psicológico y en muchos casos con una terapia conductiva con medicación (psicofármacos) prolongada.

Síntomas del Síndrome de Excitación Sexual Persistente:

- La mujer experimenta una excitación física muy intensa que puede permanecer durante extensos períodos de tiempo, algunas veces días o incluso semanas. El orgasmo puede calmar temporalmente los síntomas, pero vuelven en cuestión de horas.

- Se excitan fácilmente con pequeñas cosas como vibraciones de celulares, mientras viajan, en un tren, cuando andan en bicicleta.

- Hay debilitamiento.

- Dificultad de concentración en las tareas cotidianas.