Hola, bakunos. Espero que estén bien, les contaré mi caso:

Tenemos mi esposa y yo una mastín napolitana de 5 años y medio, y vive con nosotros desde que tenía 1 mes. Estuvo internada 6 meses en escuela de obediencia, y sabe hacer sus necesidades afuera del depto. Fue operada 2 veces por displasia de cadera, y su recuperación es considerada por la misma veterinaria como un milagro, algo que ni ella esperaba (puede correr, brincar y jugar como si no hubiera sufrido eso jamás, y pesa casi 50 kg, sin estar gorda para nada). Hace 2 meses nació nuestro primer hijo, y ella tomó una actitud super protectora y cariñosa al respecto. Evidentemente y sin intención, hemos tenido menos cantidad de tiempo para ella, por obvias razones. Shaytán (así se llama) está esterilizada y por desórdenes hormonales está en celo (de mentiras, pero con sangrado y todo el show). Desde hace 1 semana empezó a orinar al lado de la puerta de la casa, van 3 veces que lo hace y mi primera reacción fue pensar que necesitaba salir, pero lo hace en momentos específicos cuando no estamos frente a ella. Me imagino - espero sus opiniones al respecto - que lo que sucede es que está ansiosa y llamando nuestra atención, así que supongo que hacerle un poco más de caso y ser MUY incluyentes con ella podría resolver la situación, antes que mi esposa pegue más el grito en el cielo y tengamos que deshacernos de ella. Les agradeceré con el alma que me den sus opiniones y sugerencias para poder resolver este pequeño problema emocional de Shaytán. De antemano mil gracias y saludos!