Carlos Mota
Marzo 12, 2018

AMLO se presentó ante los banqueros como el Mesías tropical que muchos no creían que fuera real

Ojos totalmente abiertos; manos en la frente en señal de descrédito; palabras altisonantes pronunciadas con horror por lo que acababan de escuchar. Así reaccionaron los banqueros el viernes al haber oído a Andrés Manuel López Obrador en la Convención Bancaria.

Un participante, de los empresarios más importantes del país, me dijo que qué bueno que AMLO mostró quien realmente es frente a esta audiencia, y que deberían invitarlo con frecuencia a otros foros similares a fin de que quienes han sido seducidos por su discurso vean quién es en realidad.

Los banqueros tienen razones de sobra para estar horrorizados. Entre otras cosas, AMLO aseguro que: (1) procederá a la cancelación del Nuevo Aeropuerto y reasignará todo ese esfuerzo de construcción para la adecuación de las 2 pistas de Santa Lucía; (2) asumirá él, personalísimamente, el control de la seguridad del país, como Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, a diario, desde Palacio Nacional a las 6:00 a.m.; (3) no responde por las fuerzas sociales que se desaten si pierde la elección y no le gusta el resultado —la cita del “tigre” suelto—; (4) pedirá el concurso de los bancos para dar créditos a los sectores vulnerables de la población, a gente humilde que sí paga; (5) hará una amplia política social de duplicación de la pensión a los adultos mayores y programas de“aprendices” para los “ninis”.

Ombligo de fuera, desparpajado, casi desafiante, AMLO se presentó ante los banqueros como el Mesías tropical que muchos no creían que fuera real. En los pasillos un banquero le dice a su colega que lo tendrá difícil para responder por todos los créditos que otorgó a las empresas que actualmente construyen el Nuevo Aeropuerto: “te lo vas a tener que tragar”, se mofa, y explica que los comités de crédito y las reglas con las que se otorgaron dichos créditos tienen candados específicos que no pueden ser violentados. En otras palabras: no se puede llevar el recurso de la construcción actual hacia otra construcción diferente a la que se comprometió el financiamiento.

“Nos está avisando que deja las cosas listas para que surja una revolución”, me dice otro asistente. Un alto funcionario público se acerca y me dice que son inviables todas y cada una de las propuestas que López Obrador planteó. “Lo peor es que todavía les dijo a los banqueros que con ellos no se va a meter”, revelando con esa frase la palanca de poder que gozará tener. No cabía en los banqueros el estupor de lo que acababan de oír. Algunos señalaron que es urgente sumar fuerzas en torno al segundo lugar, sea quien sea y que, a como dé lugar, hay que detener a AMLO.


Fuente


Independientemente de que los banqueros sean unos desgraciados que se han beneficiado una y otra vez de la "generosidad" del gobierno en turno (¿les dice algo la palabrita Fobaproa?), lo cierto es que, como ya lo he señalado desde hace mucho, el asunto de la cancelación del Nuevo Aeropuerto NO ES FACULTAD DEL PRESIDENTE, sino DEL CONGRESO, que es quien APRUEBA las ideas, propuestas, ocurrencias o estupideces que se le puedan ocurrir al sr. presidente. Agréguenle lo que se señala en este artículo (la IMPOSIBILIDAD de trasladar los fondos autorizados POR LA BANCA para el financiamiento de la obra), y tenemos la fotografía de cuerpo entero del Peje: PO-PU-LIS-MO, PO-PU-LIS-MO y más PO-PU-LIS-MO barato. "YO, TODOPODEROSO EMPERADOR DE TODO MÉXICO, HARÉ LO QUE MI PODEROSA Y SACROSANTA VOLUNTAD SE ME ANTOJE, Y ESOS QUE OSEN OPONERSE A MI PODER, SE LAS VERÁN CON MI MÁS ATROZ CASTIGO". "Al pueblo... pan y circo", dijo Cayo Julio César hace más de 2,000 años, y la historia nos dice en qué terminó su imperio... y él mismo. Vender cuentitas de colores a los que se dejen seducir por el espejismo del brillo de las mismas, es LA ESPECIALIDAD del "ilustre" Mesías Tropical.

Algo que francamente es ya no de risa loca, sino lo que le sigue, es pedir "dar créditos a los sectores vulnerables de la población, a gente humilde que sí paga". ¿Sí paga? Si no tienen ni para el "día a día", ¿con qué van a PAGAR el crédito? (ya, si quieren, olviden las garantías necesaria para ASEGURAR que se tiene solvencia para ello). ¿Así, o más PO-PU-LIS-TA? Había escuchado "propuestas" descabelladas, pero ésta... ya ni como eso califica. Lo de duplicar la pensión a adultos mayores y querer hacer que los "ninis" se pongan a trabajar ("¿y yo porqué?", dirán ellos, tan confortablemente instalados en su indolencia), es... querer aparecer como el gran mecenas que mantiene a toda el populacho. La pequeña-GRAN diferencia entre el mecenato y ÉSTO, es que los mecenas usan SU DINERO para ello; el Virrey de Macuspana utilizaría NUESTRO DINERO para fomentar el culto a SU PERSONALIDAD. Lo digo y lo mantengo: el Peje es la fórmula del POPULISMO en su acepción mas arrabalera posible.