Un día en la Cámara de Diputados:
Van pasando dos compadres frente al Palacio Legislativo y de repente
oyen gritos desde dentro del recinto:
¡GUEVÓN!, ¡IGNORANTE!, ¡LADRÓN!, ¡VIOLADOR!,
¡MARICÓN!, ¡DEGENERADO!, ¡RATERO!, ¡COME MIERDA!,
¡SINVERGÜENZA!, ¡CABRÓN!, ¡VENDE...